Trabajamos para fomentar, proteger y fortalecer la democracia en todo el mundo. Creemos firmemente en la creación de sociedades justas e inclusivas, donde todos los grupos participan de manera plena en el proceso democrático. Tenemos el compromiso de lograr cambios reales y positivos en la vida de las personas mediante la creación de parlamentos nacionales fuertes que pueden lograr resultados en cuestiones como la salud, el desarrollo sostenible, la paz y la seguridad.
Equipamos a los parlamentarios y parlamentos para que lideren este cambio, aprovechando los conocimientos de nuestros miembros, prestando ayuda práctica y entregando recursos, animando al diálogo y reuniendo a parlamentarios de todo el mundo. Participamos en la democracia a todo nivel, desde políticas influyentes mundiales a apoyo a los marginalizados. Toda nuestra labor busca fortalecer los postulados básicos de la democracia, derechos humanos, igualdad y el estado de derecho, valores consagrados en nuestra histórica Declaración Universal sobre Democracia, con el fin de lograr vida mejor para los ciudadanos.
La base de todo lo que hacemos es el diálogo y la democracia, en conformidad con las creencias fundamentales de nuestros fundadores. Nos expandiremos y desarrollaremos nuestra labor para responder a los retos del siglo 21.